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En este Blog sobre El Ser Cósmico, podrás meditar y estudiar Todo el material del que nuestra Escuela dispone y que ha sido canalizado desde el Corazón, para ser entregado a quien resuene con esta información.

Nuestra recomendación es: Cierra los ojos, abre la puerta de tu corazón, deja que tu alma vibre y sumérgete en esos Mundos en los que el Espíritu logra expresarse, tal cual es.

Siente y vive con nosotros el TODO.

7ª Tarea del Ser Cósmico - Meditación MER-KA-BA




Antes de comenzar es necesario hacer una breve explicación sobre el MerKaBa, ya que para realizar esta meditación es preciso conocer su significado. De forma explícita y en síntesis, podemos decir que MerKaBa es el Vehículo por el cual se expresa el Espíritu en sus infinitas posibilidades. En hebreo significa tanto el Trono de Dios como el Carro o Vehículo que lleva el Cuerpo Humano y el Espíritu de un lugar a otro.
Tal y como lo explica Drúvalo Melkizedec, en egipcio, la palabra Mer-Ka-Ba, es realmente una composición de 3 palabras: Mer para referirnos a una “clase especial de Luz” que genera un campo contrarrotatorio; Ka que significa “Espíritu” y Ba que significa “la interpretación de la realidad”, es decir el Cuerpo Humano manifestando el Espíritu, la personificación de las fuerzas vitales de la Entidad, el proceso que se va a vivir en esta meditación. Por tanto, en resumen, podemos definir Mer-Ka-Ba como un Campo contrarrotatorio de Luz que interactúa y traslada el Espíritu y el Cuerpo desde un mundo hasta otro, aunque sabemos que es mucho más todo lo que queda por descubrir sobre este vehículo de Luz. El Mer-Ka-Ba se extiende a todas las dimensiones posibles y en cada dimensión usa las leyes de esa dimensión para manifestarse.
En este séptimo encuentro vamos a realizar una síntesis arquetípica de todas aquellas fuerzas, que hemos ido experimentando hasta ahora. En esta vinculación quántica, vamos a poder vivir algo que puede parecernos un hecho “espectacular”, pero no es así, es algo tan propio de las Entidades Celestes, que al vivirlas en la Tierra, nos va a parecer extrañas, fenoménicas o incluso extraordinarias. Debemos dejar esas fases emocionales para otro momento, sin poner expectativa, pero si poniendo fe.
Como es lógico, esta frecuencia vibracional, estará en resonancia absoluta con el Espíritu receptor en toda generación del Principio Único. En caso contrario no existiría la forma de encajar ambos aspectos del Ser. Cada individuo en su frecuencia quántica, marca la posibilidad de una doble, triple, o múltiple encarnación en el mismo espacio-tiempo, gracias a lo cual, va a poder dictaminar la tipología MerKaBa que su Espíritu va a expresar. No siempre estas opciones evolutivas se dan, pero si es frecuente que sean experimentadas por las Mónadas encarnadas, así como por entidades Avatares, Deidades Arquetípicas y otras fuerzas espirituales de calibre similar. Esto se debe a que la potencialidad de su personalidad (Ba) es tan poderosa que puede permitirse expresarse de múltiples modos a un tiempo. Resolviendo de ese modo, aquello que vino a resolver, tejiendo un paradigma claro, en el que cada una de las fracciones, es un motor que funciona en simultaneidad con todos sus elementos formando un Todo.
El Ba, como se puede ver, no es una forma, ni un característica, ni siquiera una parte de nada. Es más bien una Fuerza Espiritual con identidad propia y con su propia forma de expresarse dentro de un contexto dado. El Ba se desvela al Ser, cuando en su proceso evolutivo la Entidad alcanza a encarnar la divinidad que abandonó, sólo entonces el Ser integra su Ba y se completa para no volver jamás a alejarse de quien fue.
 (pequeña pausa)
Comenzamos…
Respiro profundamente, lenta y sincrónicamente. Relajo el cuerpo y concentro toda mi atención en la respiración. Siento la sístole y la diástole, dentro – fuera, dentro – fuera, dentro-fuera. Inspiro… e inspirando… me inspiro. El aire penetra en todas mis células, las regenera, las nutre. Sigo respirando… siento como concentro toda mi energía en la sede de mi alma y ahí en ese espacio vital, abrazo todo lo que fui, soy y seré. Lentamente exhalo y exhalando siento en profundidad la Vida de todo lo creado. Me siento vivo en este AHORA eterno.
Siento mi Espíritu latiendo en mi interior, con la voluntad de continuar encarnando tal cual es. Le ofrezco nuestro vehículo, nuestro MerKaBa, la geometría se hace palpable a mi interior, mi Cuerpo de Luz se expande, el MerKaBa soy yo. Siento como la vibración de todo mi Ser se eleva, percibo a la perfección mi Luz Interior. Continúo lenta y profundamente respirando. Mi Luz está viva, palpita, crece, se asienta, se establece… me siento profundamente agradecido por vivir con consciencia este proceso, viendo la Vida de la realidad en la que emerge mi Espíritu.
Permanezco respirando y sintiendo mientras mi Cuerpo de Luz sigue palpitando, elevándose, consciente de su Cielo... El Cielo está en la Tierra… Lo sé, lo siento…Viajo en mi MerKaBa, puedo ser y estar donde quiero.
(pausa)
Me encuentro concentrado y atento en mi Luz interior. Es tan presente, auténtica y amorosa que decido disfrutar de este instante de por vida. La abrazo y abrazándola siento como por vez primera trasciendo la dualidad. Somos Uno, no hay separación. Puedo amar quien soy, sentirme enamorado de mí Ser. Soy, somos y seré…
El Camino sempiterno muere en mí para nacer un espacio en el que el rumbo, el destino y la meta han desaparecido, pues ahora la prioridad no es llegar a ninguna parte, sino saber que ya he llegado y que ahí, en ese espacio sagrado, está Todo. No hay más separación. No hay dualidad, ni división. Todo es Uno.
Respiro mi nuevo estado de amor. Mi nueva cualidad de Ser Yo. Respiro Todo lo que Existe y amparado en ese estado, comienzo a conocerme de nuevo mucho más profundamente. Las adversidades son ajenas a mí Ser. Aquí no hay miedo, no hay dificultad, no hay límite, no hay nada que me reste poder personal.
Permanezco y siento como en unión y presencia vivo este ahora eterno…
Aquí consciente de mi cuerpo, de mi alma, de mi espíritu, de todo mi Ser, Soy.
(pausa)
Anclado en mi vehículo MerKaBa puedo moverme a través del espacio, el tiempo, las dimensiones y planos, siempre accediendo desde lo más elevado y conteniendo las leyes que operan en cada dimensión y grado. Sólo desde esa resonancia voy a poder recorrer mi Multidimensionalidad. Aquí es cuando el propio Universo, como Entidad se conecta a mi Ser, y unidos siendo Uno, vamos a poder Ser allí donde nuestra presencia sea requerida.
Permanezco y siento como el Universo se acerca… su presencia es inmensa… su Luz insondable, su Amor interminable… respiro y permito que la Luz del Universo me embargue.
(pequeña pausa)
Siento como el Universo me envuelve y en sus brazos, siendo Uno, puedo sentirme Todo lo que Existe. Es un estado de Comunión tan auténtico y profundo, que solamente ahí sé que estoy con Dios. Una música nos acompaña. Suaves notas están surgiendo de cada uno de los instrumentos que cada Ser Humano despierto está tocando. La composición es infinita.
(espacio para la música)
Habla por sí misma de todas las experiencias que de por vidas la Raza Humana vivió en sus días de gloria y desdicha. Para que algunos aprendieran de otras razas. Para que muchos aprendiéramos de otras formas de Amor. Para que unos cuantos aprendieran a respetar la enfermedad y el dolor. Para que otros tantos más supieran que el Arte es un Don muy especial. Para que muchos comenzaran a creer en algo más. Para que los insurrectos dejaran de creerse poseedores de la verdad, abandonaran la soberbia y conocieran la humildad…
La raza humana se creó para todos, para que siempre en algún lugar, existiera un Ser Humano que en sus manos hallara la Verdad, sería entonces cuando el UNIVERSO se aliaría con ellos y acompañándolos desde todos los planos, conseguirían conquistar aquello en lo que creían desde su más íntima verdad.
Permanezco y siento anclado en mi MerKaBa como cada Ser Humano que ha alcanzado resonar con la verdad del Universo, estamos unidos formando un gran círculo, permitiendo que nuestra experiencia y nuestro dolor, se eleve en una única canción.
Escuchamos esas notas y ahí cantamos con la voz de nuestras almas, al unísono, la partitura de la Raza Humana.
Así dice la canción de las Almas:
Sentí la tierra, sentí la semilla que se ocultaba en ella, sentí al agua humedecer aquella belleza, sentí al aire susurrarle al fuego, que se brindara y elevara sus llamas, para que todos las viéramos. Sentí… y sintiendo esperé… esperé el momento.
Esperé, cerciorándome de que lo verosímil, era lo único que me iba  a hacer creer. ¿Y eso que es? – me pregunté. Pues verosímil es, aquello que de la tierra crece, para con sus raíces florecer, tras que el aire nutra las hojas, y viren a tostadas antes de caer. Verosímil  es, acariciar las hojas con gotas del manantial del saber, observar como el tronco que las sustenta, adquiere irisados tonos, cada vez que puede verlas crecer. Verosímil es, la opacidad más alta y la claridad más baja. La infinitud de tu Alma y la partícula más oblicua, de todo tu Ser.  Verosímil es, el néctar que se derrama, fluyendo por ese tronco intacto, fulminado por el tiempo, anclado en el espacio, y sólo encontrado por los más diestros y alados. Verosímil es, caminar paso tras paso en pos de tu serenidad. Caminar pisando con certeza piedras, pozos y cordilleras, sin querer dejar de caminar.
Cuando el Árbol de la vida encuentre, lo abrazaré. Será para mí para siempre. No me alejaré. Recordaré que eso ya lo hice, y no me olvidaré de cuánto me costó volver.
De verdes hojas el Árbol se llenará. La suave brisa las mecerá. Un dulce manantial de agua, nutrirá sus raíces, mientras de la tierra surgirá, el más bello e intenso fuego que nunca nadie conseguirá apagar. Ese mismo día el éter me envolverá. Me arropará con todas sus fuerzas, con todo el Amor que es capaz de brindar. Sólo entonces sabré que en mí yace la divinidad. La fuerza del Espíritu de la Unidad. Ahí será cuando El Portal de Dios se abrirá para siempre en mi Corazón, para no cerrarse jamás. En ese sagrado lugar, acogeré a todo mí Ser. Lo meceré. Lo respiraré. Juntos en esa comunión, seremos los Únicos.
(pausa)
Una Nueva Orden se ha creado. La Raza Humana se está transformando en una única Raza. Los aquí presentes nos hemos entregado al Servicio Planetario. Hemos establecido un compromiso Mundial, para que un Nuevo Paradigma sea el que conquiste el Corazón de Gaia, a través del Amor por este Planeta que es nuestra Casa. Podemos sentir a la Madre Naturaleza como nuestra Madre Primordial. Podemos sentir al Espíritu Celestial como nuestro Padre Universal. Podemos sentir a toda la Humanidad como nuestros Hermanos. La Verdad nos conecta con el Plan Global de Evolución. No existe dualidad, solamente unidad. Todos somos Uno con Dios.
En esa cohesión siento haber alcanzo el Portal de Dios. Penetro en él. Cruzo el umbral. Siento que es el momento de que me sea entregado mi Don, ese que desconozco y que fragüé gracias a mis pretéritas experiencias, a todo por lo que luché y a todo lo que amé. Mientras yo separado de mí vivía en un Cuerpo Humano, Dios creaba para mí el tesoro de lo labrado. Doy con un hermoso Árbol. Es el Árbol de la Vida. Tiene frutos para cada uno de nosotros. Me siento en su pie, coloco la espalda contra el tronco. Respiro y haciéndolo sé que este es mi nuevo árbol. Él conserva mi genealogía. Este es el Árbol de mi Familia Original. De mi Familia Espiritual. Sólo ellos saben todo de mí y de mi Don.
Me levanto para recoger el fruto. Una preciosa Flor llama mi atención, la acaricio y al hacerlo me muestra qué es lo que mi experiencia gestó. La siento. Siento y recuerdo. Comprendo. Ese Soy Yo. Ahora sé lo que tengo que hacer. La Flor de la Vida que en su día creé, contiene todo lo que de mí gesté. Es el momento de recoger ese Don y ponerlo al Servicio de Todos, siendo hoy y siempre Yo.
Permanezco y siento el flujo de mi Don, como me es entregado por la Flor, diagramas de Luz me invaden, penetrando en todas mis células. Mi MerKaBa se expande mostrando su Luz a quien la pueda ver. Respiro y expando mi Luz por doquier.
(pausa)
Y aquí nos encontramos, amparados hoy y siempre por el Gran Manantial, donde viven desde antaño los primeros en llegar. Son los 22 Arcanos, los más incognoscibles y ancianos, los que de algún modo y a su manera nos quisieron siempre ayudar. El Amor más infinito, en sus Grandes Corazones lograron llevar, hasta el final de los días, esos en el que cada cual, consigue acceder a la Mesa, donde ellos nos esperaran.
Agradezco todo lo que soy, todo lo que hago, todo lo que tengo, el Ser Humano, agradezco, agradezco y agradezco…
Permanezco agradeciendo y sabiendo que formo parte de este inmenso y amoroso Universo, así agradeciendo voy recuperando la consciencia de esta dimensión.
Poco a poco, regreso del plano de conciencia en el que me encuentro, trayendo conmigo Todo lo que Soy. Así me anclo a Gaia y vibro con ella al unísono.
Siento como ambos nos nutrimos de un Todo superior y ahí permanezco y siento… siento… siento… mientras poco a poco regreso a esta dimensión…





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